Existe una curiosa leyenda que relata la creación de Japón a partir de la unión de dos deidades  kami: Izanagi e Izanami. De esta pareja nacieron tres kami: la diosa del sol y de los cielos azules, de nombre Amaterasu, el dios de los océanos y las profundidades: Susanoo, y el dios de la luna y de la noche oscura, llamado Tsukuyomi.

Amaterasu y Susanoo se pelearon. Susanoo se enfadó y Amaterasu se asustó y se ocultó en una cueva, provocando que el mundo se quedara a oscuras. Tuvieron que engañarla y hacer que se pusiera celosa para que saliera y se recuperase la luz. Susanoo había sido desterrado por la pelea. Mientras caminaba descubrió que una serpiente de ocho cabezas atemorizaba a la población y quiso librarlos de ella. Decidió emborrachar con sake a la serpiente y cortarle las cabezas con la espada que esta tenía. Quiso tener el gesto de entregarla a su hermana como símbolo de sus intenciones de paz. Amaterasu regaló a su nieto Ninigi que iba a ser enviado a gobernar el mundo terrenal, una joya muy especial de forma curva, que sería heredada a su vez por su nieto, Jinmu, quien fue coronado como primer emperador japonés.

Ese fue solo el comienzo del que hoy es el Japón Imperial. El germen del que hoy es un próspero país insular entre el océano Pacífico y el Mar de Japón. Está compuesto por 6852 islas y su capital, Tokio es la mayor área metropolitana del planeta con más de 30 millones de habitantes. Desde 1947, Japón es una monarquía constitucional con un emperador y un órgano de gobierno. Es la tercera mayor economía del mundo.

Hokkaido, Tohoku, Kanto, Chubu, Kinki, Chugoku, Kyushu y Shikoku son las ocho regiones que componen el territorio dividido en 47 prefecturas.  Japón cuenta con 337 km cuadrados de los que más de 13 mil son agua.

Japón es uno de los países más interesantes del planeta que se distingue por su fortaleza, su disciplina, sus contrastes y su basta tradición cultural. Se sitúa a la cabeza de la tecnología y de la economía mundial. Descubrir Japón viajando en crucero es una experiencia que vale la pena vivir. Hacer un crucero por Japón y Corea desde Tokio en el Diamond Princess es una de las maneras más cómodas, prácticas y completas de adentrarse en el país del Sol Naciente.

Crucero por Japón en Verano de 2019 con Princess Cruises y con vuelos desde Madrid o Barcelona

Princess Cruises ha diseñado un paquete aeroterrestre que incluye un crucero a bordo del Diamond Princess, un buque de 116 mil toneladas con capacidad para 2600 pasajeros y 1100 tripulantes. Se trata de un barco construido para el mercado japonés y posicionado en Asia que opera itinerarios tan interesantes como el crucero de 12 días en abril coincidiendo con Semana Santa; el crucero de 12 días en mayo desde Kobe, con noche en Tokio y dos noches en Kioto; y el crucero de 9 días por Japón en agosto de 2019. El crucero incluye guía asistente y excursiones opcionales en español. Una oportunidad única de conocer el Japón por el que viajan los propios japoneses, de sumergirse en su cultura y en su idiosincrasia con la garantía del excelente servicio a bordo y en tierra de Princess  Cruises.

Curiosidades sobre Japón que te gustará saber antes de navegar desde Tokio en el Diamond Princess

–Japón es un país de tópicos y de contrastes: cuenta con una superpoblación salvaje pero al mismo tiempo es el país del orden y del funcionamiento perfecto del sistema; combina una forma de vida espiritual con una sociedad de consumo de las más potentes del mundo; practican la cultura zen al mismo tiempo que se sitúan a la cabeza de la creación y consumo de videojuegos; cuentan con las características propias de una sociedad insular pero al mismo tiempo viven en conexión directa con el entorno; vivieron dos siglos y medio de aislacionismo que marcó su carácter y su evolución como sociedad.

-Entre las curiosidades que sorprenden al viajero destacan también las figuras de gatos que colocan en los comercios en Japón. El hecho de que el inglés no sea de uso común en el país también sorprende y dificulta la comunicación; los letreros de las zonas rurales suelen estar en alfabeto japonés; su idioma es difícil incluso para ellos dado que cuentan con un alfabeto propio y con un alfabeto silábico. El japonés medio conocer unos 2000 caracteres. Se tarda unos diez años de media en aprender unos 1000 caracteres y un estudiante universitario suele llegar a conocer unos 2.500. En ocasiones hacen falta hasta 48 trazos para escribir una sola palabra.

-En cuanto a la comida, el hecho de que su gastronomía tradicional se esté popularizando en el resto del mundo hace que platos como el sushi, el ramen, el okonomiyaki, el yakitori, la tempura, las giozas, el yakisoba o los fideos udon sean conocidos por los occidentales. Sin embargo, las cartas no suelen estar en inglés de modo que es frecuente tener que recurrir a los platos de plástico que suelen representar los platos de los restaurantes para saber qué menú elegir.

-También es frecuente consumir bebidas de máquinas expendedoras en las calles de modo que no es difícil conseguir una bebida aunque no sepas pedirla en japonés. Lo hacen así para evitar colas en las tiendas. Es importante saber que no en todas partes aceptan tarjetas de crédito de modo que es conveniente llevar dinero en efectivo.

-Se dice que los japoneses se construyen su religión a medida. Practican el sintoísmo, el budismo y el confucionismo como filosofía de vida. El respeto y la lealtad al sistema son sus principios básicos y respetan sobre manera la propiedad ajena. Manifiestan desapego a los bienes materiales. Es muy interesante visitar sus templos como los sintoístas con los toriis o arcos tradicionales japoneses que se ubican en la entrada y los templos budistas llamados otera con sus enormes figuras de Buda. En los templos sintoístas también se ubican pequeños tablones de madera ema que contienen plegarias y esos para que los kami o dioses sintoístas las tengan en cuenta.

-A lo largo del año los japoneses celebran numerosos festivales sintoístas o matsuris llenos de luz y de color como el festival de las carrozas de Aomori, el de los Farolillos de Akita -kanto matsuri de Akita-o el de los fuegos de Kumano.

-También es muy importante para los japoneses la época de floración y observación del cerezo en flor. Se llaman Sakura y Hanami, respectivamente. Son una experiencia única para vivir en el país. Además, los japoneses veneran mucho a su Monte Fuji, para ellos la montaña más bonita del mundo. Se dice que es tímido porque se deja ver muy poco debido a la niebla y a las nubes que suelen ocultarlo.

-También se distinguen por su timidez las conocidas Geishas –señoras e compañía- y las Maiko, sus aprendices. Son una profesión en desuso que prácticamente puede verse solo ya en Kioto.

-En cuanto a los kimonos, mucha gente los utiliza pero casi como una atracción turística. Los japoneses usan kimono de verdad en ceremonias y cenas de gala. La gente que vemos por la calle con atuendo similares suelen ser turistas de otras partes de Asia. Se usa tanto el masculino como el femenino.

-En cuanto al uso de taxis, suele ser frecuente que estén decorados profusamente y forrados de ganchillo. El taxista suele ir ataviado con corbata y guante blanco y se considera de mala educación que sea el usuario el que abra la puerta. Hay que esperar a que el conductor te la abra.

-Otra curiosidad de la cultura japonesa es el pachinko, una especie  de sala de juegos en la que se juega con bolitas de acero. El juego está prohibido en Japón por lo que las bolitas se canjean por peluches, no por dinero.

–La cultura Kawaii es otro de los fenómenos que sorprende en Japón. Kawaii es un adjetivo que puede traducirse como tierno, lindo, adorable… es una forma de edulcorar la cultura japonesa de lo adorable.Numerosos objetos, vestimentas y lugares se inspiran en este fenómeno. Por ejemplo, las zonas de fumadores están indicadas con un muñequito kawaii que recuerda que está prohibido fumar caminando.

-El tren bala suele ser una experiencia que impresiona al visitante. Se dice que en los últimos treinta años solamente ha acumulado un retraso medio de 6 segundos.

-Otros elementos identificativos de la cultura japonesa son las mascarillas, el manga, la magia, los cables a la vista debido a la frecuente actividad sísmica en la isla, el hecho de comprar un coche con aparcamiento incluido, los hoteles cápsula, lo mal visto que está dejar propinas, etc.

Lugares de interés que puedes conocer en tu crucero por Japón y Corea con Princess Cruises

Tokio: es la capital del país y entre los lugares que no te puedes perder figuran el Santuario Meiji, la Plaza del Palacio Imperial -que no es visitable- y su gran jardín en medio de la ciudad; el templo de Asakusa, la calle Nakamise, el cruceo de Shibuya -el paso de cebra más transitado del mundo-; el perrito Hachiko; el barrio de Shinjuku; el de Akihabara; la Torre de Tokio; el mercado de Tsukiji; El barrio de Odiaba, la calle Ginza y Omotesando; el Teatro Kabuki y el barrio Roppongi.

Kamakura y el gran Buda, así como los templos de Kotokuin y Hasedera.  El castillo de Nijo -última residencia del emperador en Kioto-,  el santuario Fushimi Inari o Fushimi Inari Taisha (伏見稲荷大社) es uno de los más conocidos e importantes de Kioto y de todo Japón. El pabellón dorado, el bosque de bambú, el barrio de Gion -con las geishas-, las calles de Shijo y Kawaramachi, Pontocho, la estación central y la torre de Kioto.

Ya en Osaka, conviene detenerse a contemplar el castillo de Osaka, la calle Dotombori, el mercado Kuromon, la Torre Umeda Sky (el mejor observatorio para ver la ciudad). En Nara, el parque de los ciervos sagrados y el templo Todai-ji  donde se ubica una estatua gigante del Buda Vairocana conocido simplemente como daibutsu.  

La visita a Hiroshima incluye la cúpula de la Bomba Atómica, el parque y la campana de la Paz, el museo de la Bomba y el santuario Itsukushima con un torii gigante flotante. En Kochi, los cruceristas visitan el castillo más bonito de Japón con una estructura de madera impresionante. La zona de Miyazaki es conocida por el Surf y en Kumano lo más atractivo (aparte de su vinculación con el Camino de Kumano) es su festival de fuegos. En Nagasaki se visita el Museo de la Bomba y el santuario sintoísta. En Kobe, el viajero se adentra en su historia del comercio de perlas, también es conocido por su famosa carne de Kobe. Ya en Busán, en Corea, se puede apreciar la enorme diferencia paisajística y cultural con Japón. En Busán es visita obligada el parque y el templo de la ciudad, el cementerio de Naciones Unidas, la calle Gwangbokro y la plaza Biff, así como el mercado de peces vivos.

Anímate a descubrir en este 2019 las maravillas que esconde el país del Sol Naciente. Si estás buscando un crucero para tu Luna de Miel, si quieres celebrar un aniversario especial, tu jubilación, unas vacaciones con las que llevas años soñando o si quieres descubrir una nueva forma de viajar navegando, este es tu viaje. Reserva ya tu cabina a bordo del Diamond Princess de Princess Cruises y descubre de primera mano uno de los territorios más fascinantes de la tierra.